Manolo En Vogue.
Hace unas semanas volví de Madrid para pasar unos días en Coruña y descansar de esta gran ciudad, entonces se me dio por ir al desván y ver un poco los recuerdos que en él se guardaban. Para mi sorpresa encontré mi libro de 'Pobre Manolito' y no se por qué pero me lo volví a subir a casa para volver a ojearlo y después me pregunté qué interesante sería conocer a un Manolito adolescente o Universitario, ¿verdad?
Pues el otro día, gracias a un retweet de mi seguidor favorito @martinmartineti , vi como ese pensamiento se hacía realidad con la presentación de una portada de Seix Barral. ¡Si ha vuelto!, Manolito Gafotas revive de la mano de su creadora, una de las escritoras mas carismáticas de nuestro país.
Conocí por primera vez a Manolito Gafotas siendo bastante pequeño, tenía 6 ó 7 años cuando escuche las primeras noticias sobre él, y de la forma más curiosa. A mi hermano le habían obligado en el colegio a leerse el primer libro de esta magnifica saga, y mi madre que siempre le gustó mucho leer, pero lo que más le encantaba era saber qué narices nos inculcaban en el colegio; y una buena forma, a parte de ayudarnos con los deberes, era leerse los libros de lectura obligatoria. Aprovechaba esos momentos de después de acostarnos para tumbarse relajadamente en el sofá a ver la tele o para tumbarse en su cama con la luz de la mesilla apuntando a su libro de lectura.
Una noche, yo no podía dormir y salí de mi habitación a beber un vaso de agua y de repente escuché a mi madre reír a carcajada limpia. Fui a la sala para ver qué era tan gracioso, pero para mi sorpresa no se encontraba allí, ¡Estaba en su cama leyendo un libro!
Hasta ese momento nunca supe que un libro podía ser capaz de inspirarte ningún tipo de sentimiento, y mucho menos la risa, la verdad. Lo cierto es que además a ellos, a mi hermano y a ella, ese libro les unió de una manera muy especial, como si hubiera algo escrito en él que solo ellos, más adultos que mi hermano gemelo y yo, pudiéramos entender.
Pasaron años y por fin llegó el momento, la lectura obligatoria de Elvira Lindo nos llegó a mi hermano gemelo y a mí, pero ¡oh! nos obligaban a leer la segunda parte 'Pobre Manolito', no era el mismo libro, pero mi madre ENCANTADA, también se lo leyó y creamos ese vinculo especial que yo anhelaba tener con ella.
La verdad es que después de leer el segundo, me leí el primero y entiendo a la perfección el por qué se reian tanto mi madre y mi hermano. ¿Sabeis que hermano tenía la pequeña costumbre de meterme el dedo en el ojo por culpa de los celos?
Todos fuimos niños, de una manera o de otra, pero todos nos podemos sentir totalmente caracterizados por cualquiera de los personajes ya seas el hermano mayor, el pequeño, seas el matón, la niña pija o el fiel compañero de clase del que nunca te separas y con el que tienes un montón de aventuras. Además que daba igual que la historia transcurriera en un barrio de Madrid, todos tenemos nuestros barrios y todos tenemos esas historias con los profes del colegio público que nos suspendían matemáticas, un tio Nicolas que vivía en Noruega y es del Real Madrid (Aunque el mio es Manolo, vive en Alemania y es del Depor) o un abuelo que preferiría estar en la cárcel que los castigos que nos imponían nuestras madres.
Así, de lectura obligada, Elvira Lindo fue una de mis incondicionales a la hora de las lecturas. Leí todos sus libros de Manolito Gafotas y me encantan todos sus artículos de opinión del País y de la revista Marie Claire, ¿que os voy a contar...? Estar viendo las últimas tendencias de moda y de repente te encuentras una columna de opinión sobre el metro de Nueva York, dónde es capaz de interpretar todas las posibilidades de vivencias que todos en algún momento hemos vivido en cualquier vagón de metro... No tiene precio.
Por eso, por saber plasmar nuestras inquietudes (que también son las suyas), por alzar la pluma para dar a conocer lo evidente, lo que todos sabemos y vivimos, por esa magía a la hora de transmitir sensaciones y por hacer que de un libro obligado se llegue a amar el Arte de las Letras, gracias.
Y sobretodo mil gracias porque diez años después nos vuelvas a deleitar con una nueva aventura de Manolito Gafotas de la mano de Seix Barral. Prometo ser de los primeros en comprarlo.
Un saludo,
Rubén Alexandre Barral Enríquez.
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