La burbuja de Lavapiés. Uno de los artistas travestis del Barrio. |
Si
hay algo anodino en este mundo es la situación social de muchos
colectivos en los que nadie repara que serÃa lógico que ya se
vieran de manera natural. Millones de ellos gritan en silencio una
libertad que no se les entrega a diferencia de los, mal considerados,
normales.
Hace
semanas un hecho marcó las portadas de los periódicos digitales,
indignándome y reconcomiéndome hasta lÃmites que ni yo mismo
conocÃa que podrÃa llegar a sentir.
Imagenes Cedidas por el conectivo que realizó el Primer Orgullo Multicultural de Lavapiés en el año 2013. |
Un
transgénero, a grito de “tú eres maricón y un monstruo” fue
incivilizadamente agredido en nuestro barrio de Lavapiés. Un barrio
que, para mi sorpresa, dio cabida a un acto que aborrezco, haciéndome
dar cuenta de que por mucho que en aquà me sintiera libre para ser
quien soy. PodrÃa haberme encontrado con estos bárbaros indeseables
haciéndome pasar un momento que nadie deberÃa de vivir en su vida y
menos este mundo que presumimos de que es moderno.
El
estado de la transhomofobia parece invisible pero aún no lo es del
todo, como podemos comprobar. De hecho este año, una gran producción
de Hollywood por fin vuelve a dar voz a este colectivo narrando la
historia del primer transexual de la historia de la humanidad, dando
a conocer su lucha interna por vivir en un cuerpo que no es el suyo.
No hablamos de un complejo, ni de unos kilos de más; hablamos de una
persona que no se siente cómodo en su cuerpo, que odia vérselo cada
mañana cuando se levanta porque no siente que refleje lo que el
siente por dentro.
Andrea Pejic. |
No podemos presumir de una sociedad moderna solo porque el mundo de la moda ya los haya aceptado (ya hay polÃticos, intelectuales, artistas, Agencia de modelos, os dejo enlace por si queréis probar suerte amigas en el mundo de la moda, y por supuesto modelos que desfilan y dan su imagen a muchas firmas) pero todo esto no llega. Debemos interiorizar todos de una vez que todos tenemos cabida en este mundo, imponernos el propósito de ser más tolerantes, más humanos y, sobretodo, respetar para que reine la paz.
Fueron
muchos los meses donde veÃa un sin sentido escribir aquÃ, pero hoy
me he levantado con ganas de gritar al mundo ¡BASTA YA!
No
quiero más peleas, más violencia ni más vejaciones por ningún
género. Estoy harto de que a las mujeres se las maltrate, estoy
harto de que un hombre no pueda ser femenino y estoy harto de que la
gente no pueda escoger su género. Si ya he escrito a favor del
agender, me veÃa en la obligación de escribir algo en torno
a un alarma social que debemos de conocer todos.
El
sexo o género femenino no es malo y querer ser de ese género menos
todavÃa, dado que quien tenga las narices de querer ser femenino por
convicción propia con la sociedad machista que nos rodea (bajo mi
punto de vista) tiene de todo mi respeto y admiración. Tampoco
quiero dejar fuera a esas mujeres que se quieren transformar en
hombres en apariencia, porque dentro asà lo sienten; dado que
también ellas son atacadas y mucho más fuerte, dado que la mayorÃa
de los hombres que son capaces de hacer esos actos vandálicos, se
sienten más intimidados con ellos que con las mujeres que han
dejado de lado su falo y se han aumentado los pechos.
Seamos
como seamos, tengamos la libertad de ser como somos sin miedo a
represalias y, por favor, que se haga algo ya para que desciendan los
casos de violencia de género, la transhomofobia y la decadencia a la
que nos condena esta sociedad machista y populista.
Gracias.